Si nos preguntas cuáles son las mejores técnicas de marcaje para los artículos de piel, sin ninguna duda, te diremos que el termograbado. Con esta técnica de impresión en relieve el logo se estampa mediante un golpe en seco que imprime el logo en profundidad de forma permanente. Es una técnica algo más cara que por ejemplo, la tampografía, pero el resultado es mucho más elegante y sobre todo, imborrable.

¿Qué es el termograbado o "hot stamping"?

El termograbado es una técnica de impresión en la que se realiza la transferencia de pigmentos en alta resolución a la superficie de un objeto a través de un proceso de exposición a altas temperaturas. El diseño, que ha de prepararse previamente, se graba en una cuña (elaborada en materiales que ayudan en la transferencia de calor como silicona, bronce, estaño, magnesio o aluminio), y se coloca sobre una película llamada “foil” que, al mismo tiempo, se ha de situar sobre la superficie que se desea marcar.

El acabado se presenta como un efecto de hendido sobre la superficie del objeto.

Esta técnica, nos permite trabajar con diferentes tipos de materiales diferentes entre sí, como es el caso de cartón, tela, plástico, piel  o madera, entre otros.

¿Cuál es el origen del termograbado?

A pesar de que existen versiones del origen de esta técnica que nos remontan al viejo Oeste en Estados Unidos, cuando los vaqueros marcaban el ganado con hierro incandescente el logotipo del rancho al que pertenecían las reses; el verdadero origen de esta técnica de impresión se remonta al siglo XIX, donde se había convertido en un sistema muy popular en la impresión de todo tipo de grabados, especialmente de libros infantiles. La primera patente sobre esta técnica de impresión térmica, la realizó el alemán Ernst Oeser en el año 1892.

La impresión térmica estuvo reducida durante mucho tiempo a su uso sobre artículos literarios, y únicamente sobre superficies como el papel o cuero. Posteriormente, entrado el siglo XX, a partir de 1950 comenzó a popularizarse su aplicación sobre todo tipo de superficies, convirtiéndose en la manera principal de realizar marcajes decorativos o publicitarios. Además, se convirtió también en la más limpia y segura, ya que el termograbado utiliza únicamente pinturas secas y no resulta tóxico para quienes tengan que trabajar con este sistema, ni para el medio ambiente.

¿Cómo se realiza el proceso de termograbado?

La técnica del termograbado consigue un acabado de gran calidad de manera sencilla, partiendo de una primera impresión en tinta, tanto en offset como en serigrafía, y posteriormente, el grabado a alta temperatura. Actualmente, a través de sistemas offset, se puede preparar la imagen mediante las herramientas digitales de diseño y posteriormente pasar el diseño forma directa.

No debemos de olvidar que estos archivos de imagen serán vectoriales y monocromáticos, aunque también podríamos usar un modo de mapa de bits a alta resolución y continuaríamos obteniendo imagen nítida y definida. Lo cierto es que podemos obtener un nivel de calidad alto en el acabado de nuestros trabajos de forma, rápida, sencilla y barata.

Proceso de termograbado

Hay que tener en cuenta que, sin duda, lo más importante para obtener un buen resultado al realizar este proceso es la temperatura. Para realizar con éxito esta técnica deberemos de seguir estos pasos:

  • En primer lugar, colocaremos el artículo en la máquina de termograbado y lo haremos también con el “foil” (recordamos que se trata de un rollo de adhesivo en capas, habitualmente elaborado en colores brillantes).
  • A continuación, procederemos a cerrar la prensa que los une. Esta, aplicará calor y presión por medio del cliché
  • Por último, el adhesivo de foil quedará adherido y el diseño se habrá transferido al producto que estábamos manipulando.
  • Para poder resaltar y hacer más llamativo el diseño que deseamos marcar, se utilizan colores metalizados tipo oro, plata o bronce. La idea, es resaltar el diseño buscando un acabado brillante
  • Existen máquinas manuales de pequeño tamaño y a un precio relativamente asequible, que son útiles si lo que deseamos es realizar una menor tirada de producto, pero si nuestro caso es el de grabar cantidades muy elevadas de productos a gran velocidad, se habría de optar por máquinas profesionales de termograbado, capaces de llevar a cabo el procedimiento y obteniendo un acabado impecable.

¿Qué ventajas tiene el uso del termograbado?

Rapidez: La técnica del termograbado se lleva a cabo de forma rápida y sencilla de llevar a cabo y además nos permite trabajar con diferentes tipos de materiales y tamaños de artículo.

Producción en serie: Una gran ventaja del termograbado es la de poder realizarla en series, que comprenden desde una única pieza, hasta series de gran tirada, sin que esto pueda suponer un incremento que eleve considerablemente los costes del trabajo.

Calidad: El acabado que se logra mediante termograbado es de una gran calidad, resistencia a la fricción y el lavado y una mayor perdurabilidad en el artículo. Además, es resistente a agentes externos tales como altas temperaturas y niveles elevados de humedad; e incluso la continua exposición a la luz solar y la radiación ultravioleta

Aplicaciones del termograbado:

La técnica del termograbado nos ofrece una gran variedad de aplicaciones; podríamos decir, que nos permite marcar lo que se quiera en cualquier superficie. Entre los productos más habituales, encontraríamos:

  • Agendas, cuadernos, papelería
  • Dibujos e ilustraciones en libros
  • Cubiertas de libros
  • Cajas
  • Tarjetas de visita
  • Flyers
  • Entradas para eventos
  • Packaging de todo tipo

Como curiosidad, cabe destacar que el termograbado se usa de forma habitual en el marcaje de ciertos tipos de tickets, como por ejemplo los que vienen presentados en bobinas. La intención de realizarlo mediante esta técnica, es la de, por una parte, lograr una mayor nitidez de los datos que vienen impresos, y por otra, la de evitar que se borren.

Algunos inconvenientes del termograbado…

No es posible reproducir con gran calidad de detalles cuando se trata de diseños cuya medida es de dimensiones demasiado pequeñas.

No es tan versátil cuando se trata de marcar objetos con formas poco convencionales.

No es apto para superficies de productos porosos puesto que queremos evitar que se produzcan

burbujas de aire en los segmentos de grabado de las imágenes.

No nos permite reproducir y grabar colores pantone, por lo que, aunque variada, contaremos con una gama limitada de colores con los que poder trabajar.